jueves, 4 de febrero de 2010

Silenzio...

 

El tiempo pasa tan lento en mis noches,

sobre todo si echas de menos a alguien,

caminar sin rumbo en el desierto del silencio,

acabando tus horas en mudo,

despertando el sentido de la desesperación,

buscando razones, los como y porque,

sin encontrar siquiera una pista,

que disipe las tinieblas de la duda,

 

En medio de la oscuridad en la que me haz sumado,

Necesito escuchar tu voz, necesito tu guía,

cual ciego en busca de su lazarillo,

mi vida necesita de ti,

podría yo, en el exilio al cual me condenas,

destruir lo que siento, acabar con mi conciencia,

si todo este tiempo no lo he logrado,

que nos hace pensar que lo haré,

tan fácil en un día o dos.

 

Parece mentira, pero me he convencido,

que esto no terminara,

aunque me entierre o desaparezca,

aunque escape o muera,

no hay manera de borrar,

algo que no se escribió jamás,

es como querer encender el agua,

con un pedazo de papel,

el modo en que te amo es reciproco,

al valor constante de PI.

 

Te busco con el afán del alquimista,

como Ponce De León,

la fuente de la eterna juventud,

no la quiero si en ella no estas tu,

por mas cálculos que haga no encuentro,

solución posible a esta ecuación,

es como resolver fracciones infinitas,

sin saber identificarlas o lo que son,

aun así sigo aquí, alimentando el olvido,

buscando tu voz en mi recuerdos,

imaginando mi vida, sin ti.

 
 
 
 
 
 
 
 

Capitulo 13 - Sobre el amor

 
 
1 Aunque yo hablara todas las lenguas de los hombres y de los ángeles, si no tengo amor, soy como una campana que resuena o un platillo que retiñe.
2 Aunque tuviera el don de la profecía y conociera todos los misterios y toda la ciencia, aunque tuviera toda la fe, una fe capaz de trasladar montañas, si no tengo amor, no soy nada.
3 Aunque repartiera todos mis bienes para alimentar a los pobres y entregara mi cuerpo a las llamas, si no tengo amor, no me sirve para nada.
4 El amor es paciente, es servicial; el amor no es envidioso, no hace alarde, no se envanece,
5 no procede con bajeza, no busca su propio interés, no se irrita, no tienen en cuenta el mal recibido,
6 no se alegra de la injusticia, sino que se regocija con la verdad.
7 El amor todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
8 El amor no pasará jamás. Las profecías acabarán, el don de lenguas terminará, la ciencia desaparecerá;
9 porque nuestra ciencia es imperfecta y nuestras profecías, limitadas.
10 Cuando llegue lo que es perfecto, cesará lo que es imperfecto.
11 Mientras yo era niño, hablaba como un niño, sentía como un niño, razonaba como un niño,
12 pero cuando me hice hombre, dejé a un lado las cosas de niño. Ahora vemos como en un espejo, confusamente; después veremos cara a cara. Ahora conozco todo imperfectamente; después conoceré como Dios me conoce a mí.
13 En una palabra, ahora existen tres cosas: la fe, la esperanza y el amor, pero la más grande todas es el amor.
 
PRIMERA CARTA A LOS CORINTIOS
 
 

martes, 2 de febrero de 2010

¿ Que Es El Amor ? una linda reflexion desde los ojos de un niño...


En una de las salas de un colegio habían varios niños. Uno de ellos preguntó: Maestra... ¿qué es el amor?


La maestra sintió que la criatura merecía una respuesta que estuviese a la altura de la pregunta inteligente que había formulado. Como ya estaban en hora de recreo, pidió a sus alumnos que dieran una vuelta por el patio de la escuela y trajesen lo que más despertase en ellos el sentimiento del amor.


Los chicos salieron apresurados y, cuando volvieron, la maestra les dijo:
Quiero que cada uno muestre lo que trajo consigo.
El primer alumno respondió: Yo traje esta flor, ¿no es linda?
Cuando llegó su turno, el segundo alumno dijo: Yo traje esta mariposa. Vea el colorido de sus alas; la voy a colocar en mi colección. El tercer alumno completó: Yo traje este pichón de pajarito que se cayó del nido, hermano: ¿no es gracioso?


Y así los chicos, uno a uno, fueron colocando lo que habían recogido en el patio. Terminada la exposición, la maestra notó que una de las niñas no había traído nada y que había permanecido quieta durante todo el tiempo. Se sentía avergonzada porque no había traído nada. La maestra se dirigió a ella y le preguntó: Muy bien: ¿y tú? ¿no has encontrado nada?


La criatura, tímidamente, respondió: Disculpe, maestra. Vi la flor y sentí su perfume; pensé en arrancarla pero preferí dejarla para que exhalase su aroma por más tiempo. Vi también la mariposa, suave, colorida, pero parecía tan feliz que no tuve el coraje de aprisionarla. Vi también el pichoncito caído entre las hojas, pero... al subir al árbol, noté la mirada triste de su madre y preferí devolverlo al nido.


Por lo tanto, maestra, traigo conmigo el perfume de la flor, la sensación de libertad de la mariposa y la gratitud que observé en los ojos de la madre del pajarito. ¿Cómo puedo mostrar lo que traje? La maestra agradeció a la alumna y le dio la nota máxima, considerando que había sido la única que logró percibir que sólo podemos traer el amor en el corazón.


Sabes, esto me lo envió quien me enseñó, que el amor no es Tomar, Arrancar, Capturar, Forzar, Ganar o Perder.


Amar es llevar en el alma, es Recordar, es Disfrutar, Amar es ser LIBRE Y DEJAR LIBRE.



Por.: Jennie Gonzalez